El renacimiento del búfalo americano: Reflexiones sobre la muerte de Charlie Munger y Henry Kissinger
En este post, reflexionamos sobre la reciente partida de dos figuras fundamentales en la historia estadounidense del siglo XX: Charlie Munger y Henry Kissinger. Munger fue célebre por ser el socio de Warren Buffett, uno de los grandes inversionistas de Estados Unidos. Mientras que Kissinger fue el arquitecto de la geopolítica estadounidense. Ambos simbolizan el final de una era y el posible comienzo de una nueva.
Profundicemos en el panorama tecnológico para desentrañar este cambio. El objetivo de la tecnología es ampliar las posibilidades humanas. A lo largo de la historia, hemos sido testigos de saltos transformadores -desde la agricultura hasta el Renacimiento y los cimientos de la sociedad industrial- que abarcan los últimos 300 años.
La época de Munger y Buffett fue el último tramo de la era industrial, caracterizada por la producción en masa, automóviles y aviación, alineada con la búsqueda de dominio geopolítico de Estados Unidos durante la Guerra Fría con la Unión Soviética.
Sin embargo, la maniobra estratégica de Kissinger con China alteró esta dinámica. Estados Unidos orquestó una jugada maestra, debilitando a la Unión Soviética y poniendo fin, en última instancia, a la Guerra Fría.
Irónicamente, esta victoria dejó a Estados Unidos sin un rival claro, lo que provocó un declive en el sector manufacturero a medida que las empresas buscaban una producción rentable, sobre todo en China, y con ello también la propiedad intelectual y la ventaja competitiva tecnológica.
El mito del búfalo
Este escenario resuena con el mito del búfalo en los pueblos los nativos americanos. En las antiguas leyendas de los Pies Negros, una tribu que se enfrentaba a la hambruna invernal negoció un trato inesperado: una joven se comprometió a casarse con un búfalo para obtener sustento, iniciando un ritual de danza del búfalo que unía al reino animal en el intrincado teatro de la vida.
Enfrentados al reto de alimentar a una vasta comunidad, la tribu intentó guiar a una manada de búfalos a través del bosque para que cayera por un acantilado con el fin de almacenar carne suficiente y pasar el invierno.
Los búfalos se resistieron hasta que una hija de la tribu prometió matrimonio, lo que provocó una sorprendente sumisión. Dirigida por el anciano búfalo chamán, comenzó una procesión que puso al descubierto la desaparición de la hija. La búsqueda del padre, guiada por una urraca chamán, se desarrolló en un charco de búfalos, culminando en intentos de negociación y una danza del búfalo, que trágicamente resultó en la muerte del padre de la joven.
El compasivo marido del búfalo propuso la libertad de la hija a cambio de resucitar a su padre. Una vértebra encontrada por una urraca y una poderosa canción le revivieron, lo que llevó al búfalo a ofrecer a la tribu su danza. Un símbolo de la esencia cíclica de la vida.
Resurrección del búfalo de la productividad
Mercado alcista en EE.UU. Comportamiento del índice S&P durante la Guerra Fría (Azul). S&P actual (Rojo)
El coronavirus es un llamado de atención sobre el despertar del espíritu del búfalo americano y pone de relieve la necesidad de innovación. Esto se extiende más allá de la producción de vacunas y las cadenas de suministro de la economía mundial, ahora guiadas por la necesidad de la seguridad nacional.
Los avances en los sistemas de Inteligencia artificial de DeepMind (Propiedad de Alphabet) prometen una mejor comprensión de las proteínas, la materia y la energía. ChatGPT está revolucionando Internet y, en un futuro en el que la IA genera abundancia digital, las criptomonedas con su blockchain surgen como el medio para mantener la escasez digital.
La convergencia de estas tecnologías remodelará nuestra sociedad. Entramos en una nueva era de desarrollo tecnológico, que evoca la necesidad de una mentalidad similar a la que impulsó la primera revolución industrial. Ahora es necesaria una nueva perspectiva que impulse la revolución digital.
Munger y Buffett representaron la integridad, la honestidad, el aprendizaje continuo y el pensamiento a largo plazo. Estos resuenan en una nueva generación que asume nuevos riesgos en la búsqueda por la libertad y la descentralización.
Estos valores van más allá de las normas tradicionales y simbolizan el progreso logrado mediante prácticas adaptativas y un pensamiento innovador.
Munger y Buffett invirtieron en un aspecto crucial: la capacidad de las instituciones estadounidenses para reinventarse y ser estables. Dicha capacidad es más escasa en los mercados emergentes.
Si trazamos una analogía con la época de la Guerra Fría (1950-1970), la recomposición de las cadenas de suministro mundiales y el resurgimiento de la productividad favorecerán el rendimiento de los mercados desarrollados en detrimento de los emergentes.
Fuente: Bank of America.
Las muertes de Munger y Kissinger nos muestran el final de un capítulo y el posible comienzo de otro, en el que abrazar la renovación es primordial para el progreso. A medida que el mundo se adentra en una nueva guerra fría, se produce un renacimiento de la manufactura y la productividad, algo muy similar al resurgimiento del búfalo americano.
Antes de morir, Munger le dijo a Buffett que "debería escribir su obituario de la forma en cómo quisiera que este fuera escrito, y luego vivir su vida en consecuencia (…) Mira las cosas y vive al revés".